Autoridades del Sindicato de Profesionales de la Salud Pública de Neuquén, SIPROSAPUNE, presentaron un proyecto de ley para regular las residencias al interior del sistema público.
La medida alcanza a toda formación de posgrado del campo de la salud realizada bajo la modalidad de residencia, en cualquier institución habilitada de la provincia, sea con un componente de asistencia, investigación o gestión.
La iniciativa define, además, el objetivo de las prácticas profesionales en cuestión, sus características generales, la conformación de los equipos docentes que acompañaran la formación integral y distingue los tipos de residencias, así como también las obligaciones y los derechos, entre ellos el de percibir una retribución por la prestación de sus servicios, según corresponda.
A la vez, la propuesta establece los criterios para el ingreso –por concurso abierto de antecedentes y oposición- y la permanencia en la residencia –mediante notificaciones y evaluaciones periódicas.
Con igual criterio, establece los parámetros para el régimen laboral de las prácticas en cuestión. Fija una carga horaria de 62 horas semanales, que podrá llegar a un máximo de 80 horas semanales, según programa (incluida la guardia). Aclara que las residencias se desarrollarán como actividad de tiempo completo, con disponibilidad horaria total y con restricción de la actividad profesional y todas las incumbencias del título profesional al ámbito de la sede de formación durante todo el programa, aún durante las rotaciones por otros hospitales o jurisdicciones.
En cuanto la contratación, especifica que serán de renovación anual, en función de los requisitos académicos y a la aprobación de los objetivos del programa, mientras que para las guardias activas define que serán de 12 horas, debiendo garantizarse un descanso obligatorio post guardia nocturna mínimo de seis horas, fuera de la institución, así como un intervalo entre ellas no menor de 24 horas. La actividad de guardia activa no podrá superar las seis noches por mes.
Finalmente, la iniciativa determina que el Ministerio de Salud propiciará el ingreso anual de quienes hayan egresado del sistema de residencias a la administración pública, en función de la existencia de cargos vacantes y las necesidades sociosanitarias.
En la fundamentación, el sindicato agrega un recuadro con los ítems salariales que arrojará un sueldo de casi un millón 200 mil pesos para un residente. Más adelante, explican que las residencias constituyen las capacitaciones de mayor excelencia de post grado en el sistema de salud, al tiempo que aseguran que el sueldo ha quedado destruido y degradado con el Convenio Colectivo de Trabajo aprobado en el 2018 (ley 3118) y modificado el año pasado (ley 3408).
Asimismo, critican algunos aspectos del proyecto elevado por el Poder Ejecutivo en la materia, con una oferta salarial “escasa y poco atractiva”. Además, cuestionan la división discrecional de las residencias según zonas geográficas, aplicando los criterios del arraigo del CCT (que es solo para médicos), extendiéndolo a todas las residencias bajo la denominación de “incentivo geográfico”, lo que arrojará que un residente cobre más que un instructor no médico. Por último, critica que tal propuesta prioriza algunas especialidades por sobre otras, aplicando discrecionalmente el adicional por “criticidad” e incentiva a la tarea extraordinaria de guardias mediante un pago porcentual a partir de la quinta guardia y con solo 6 meses de antigüedad en el programa.
Finalmente, exigen el tratamiento de la ley de carrera profesional sanitaria tras la aprobación de la propuesta en cuestión, a fin de “encarar la real solución de fondo” y no ya “respuestas parciales, discrecionales y discriminatorias que no hacen más que socavar aún más el deterioro que nuestro sector atraviesa”.
El proyecto de ley (16588) ingresó por Mesa de Entradas el 5 de abril firmado por Juan Ferrari y Mariana Franco, secretario y secretaria de SIPROSAPUNE.
