La causa por la estafa a la Cooperativa de Energía Eléctrica de Zapala (CEEZ) se cerró con una probation. El actual presidente del Consejo de Administración, Néstor Zambelli, junto al empresario capitalino Héctor Fuentealba, asumieron su responsabilidad en la maniobra que les endilgaba la fiscalía en perjuicio de la entidad y propusieron construir a cambio un taller de montaje de la GNC por un valor de 509.000 pesos.
La iniciativa obtuvo luz verde por parte de la jueza Bibiana Ojeda, quien además les impuso a ambos protagonistas la obligación de donar mensualmente por el lapso de un año la suma de 1.000 pesos a organizaciones de bien público local.
De esta forma se dio por concluida la investigación que llevaba adelante el fiscal Diego Chavaría contra Zambelli y Fuentealba. De acuerdo a la acusación original entre el presidente de la CEEZ y el titular de la empresa Pilmayquen habían defraudado a la cooperativa en un monto estimado en el orden de los 420.000 pesos.
Según quedó establecido en la audiencia encabezada por la jueza Ojeda, Zambelli y Fuentealba deberán llevar adelante la obra en un plazo máximo de diez meses corridos.
El taller se construirá en un predio ubicado a la vera de la ruta nacional 22 que la cooperativa había adquirido hace un tiempo.
Paralelamente, Zambelli deberá donar 1.000 pesos mensuales al Centro de Salud Alborada, mientras que Fuentealba hará lo propio con el comedor del Centro Amancay, en este caso de la capital neuquina.
“La tranquilidad después de tanto tiempo es que se hizo justicia, se pudo comprobar que Zambelli estafó a la Cooperativa”, sostuvo el ex titular de la CEEZ, Alejandro Orlando.
La fiscalía había determinado que Zambelli defraudó a la CEEZ al hacerle abonar dinero en concepto de reparaciones que en realidad nunca se efectuaron. También descubrió que el empresario Fuentealba había cobrado por dichas reparaciones pese a que no efectuó ninguna tarea.
La maniobra, de acuerdo a los elementos recolectados por el fiscal, se concretaba cuando Fuentealba retiraba el cheque de la Cooperativa y le dejaba a Zambelli otro de su propiedad. Así se consumaba el retorno, explicaron los investigares. Luego, un empleado de la CEEZ viajaba a la capital neuquina para cobrar los cheques de un banco que opera en esa ciudad.
La propuesta de construcción del taller presentada por los imputados en la causa resultó satisfactoria, tanto para la jueza y el fiscal como para la propia Cooperativa que sigue siendo presidida por Zambelli.
