El municipio trabaja en la organización de los recolectores informales que conformarán una cooperativa de trabajo para administrar la planta de separación de residuos y reciclaje del Complejo Ambiental Neuquén (CAN), experiencia que cuenta con la colaboración del CEAMSE de la provincia y Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Marcela Pozzuoli, jefa del departamento de Plantas de Separación, Clasificación y Reciclaje del CEAMSE, viajó a la ciudad de Neuquén, recorrió las instalaciones del CAN y se entrevistó con el intendente Horacio Quiroga.
Pozzuoli -con 25 años de experiencia de trabajo en el CEAMSE- elogió las obras de infraestructura del CAN así como la decisión política del intendente de incorporar a la gente que trabaja en el relleno sanitario organizada en cooperativas y contó que en Buenos Aires “hay 14, cuya constitución lleva mucho trabajo pero es gratificante ver como esas personas pasan de la informalidad a la formalidad con una mejora notoria en la calidad de vida”.
“Vengo a colaborar con esta iniciativa porque el trabajo dignifica”, puntualizó la funcionaria.
Sobre la base de la experiencia del CEAMSE, empresa pública encargada de la gestión integral de los residuos sólidos urbanos (RSU) del Área Metropolitana de la provincia y Ciudad de Buenos Aires, respaldó el proyecto de Quiroga de regionalización del tratamiento integral de los RSU: “Abarata costos, permite hacer obras a gran escala, favorece al medio ambiente y mediante el proceso de reciclaje los materiales secos retornan al circuito productivo”.
El subsecretario de Empleo y Economía Social, Emanuel Riba, agradeció el apoyo, habló sobre el avance en la constitución de una cooperativa para la recolección de los materiales reciclables secos y sostuvo que “vamos a aprovechar la experiencia de Buenos Aires en Neuquén”.
Hace pocos días se puso en marcha la planta de separación y reciclaje para su puesta a punto “y cuando la cooperativa esté lista inmediatamente comenzaremos con la capacitación de los recicladores informales. Estamos ansiosos por dar inicio a esta nueva etapa”, reveló.
“El volumen de residuos susceptibles al reciclaje aumentará y dará lugar a más puestos de trabajo cuando los centros de transferencia de localidades vecinas se pongan en marcha”, visualizó entusiasmado el funcionario municipal.
El proyecto prevé la instalación de dos plantas de tratamiento y de separación en Cipolletti y en Roca, y tres plantas de transferencia en Centenario, Roca y en Cipolletti, con capacidad de 600 toneladas de residuos al día, de las cuales el 50% corresponden a la capital neuquina.
La iniciativa de tratamiento integral de los RSU de la Metrópolis de la Confluencia involucra a Neuquén, Centenario, Plottier, Senillosa, Vista Alegre, San Patricio del Chañar, Sargento Vidal, Barda del Medio, Cinco Saltos, Cipolletti, Fernández Oro, Allen, General Roca y Villa Regina.
El CAN cumple con parámetros internacionales y es considerado por la Agencia de Medio Ambiente de Estados Unidos uno de los tres mejores del país, junto con Buenos Aires y Bahía Blanca.
