En un operativo conjunto con la Policía, inspectores municipales de la subsecretaría de Comercio secuestraron un arsenal de artefactos pirotécnicos en una casa del barrio TCI que iba a ser comercializada clandestinamente en la ciudad de Neuquén.
El procedimiento tuvo lugar ayer viernes al mediodía y se secuestraron 100 kilos de petardos, cohetes, baterías, candelas y artificios tipo granada.
“Tienen un poder expansivo muy importante; una persona no habituada a su manipulación puede perder la mano y hasta la vida”, alertó Juan Carlos Piovacari, director de Inspecciones. “La gente tiene que tomar conciencia que en la ciudad de Neuquén está prohibido por ordenanza el uso y la venta de pirotecnia y que el municipio trabaja para prevenir pero no siempre alcanza si los ciudadanos no hacen su parte”, dijo el funcionario.
El Juez de Faltas ordenará la destrucción de la pirotecnia ilegal.
El operativo se efectuó junto con personal de la División Delitos de la Policía de Neuquén, que actuó por disposición de la fiscalía de turno que ordenó el allanamiento del domicilio ubicado sobre calle Río Gallegos, casi San Martín.
“Encontramos 100 kilos de pirotecnia casera almacenada en el living de la casa, un lugar no apto de almacenaje y no estaban garantizadas las condiciones de temperatura, hacía más calor adentro que afuera”, explicó Piovacari, quien no dudo en calificar la situación como “extremadamente peligrosa”.
Piovacari tuvo expresiones elogiosas para con los efectivos de la Policía, “siempre colaboran con nosotros, en este caso dándonos el dato preciso y conjuntamente con ellos se llevó a cabo el allanamiento y el secuestro de los artefactos clandestinos”.
El funcionario recordó que en la ciudad de Neuquén está prohibida la comercialización y uso de pirotecnia con destino recreativo y que esta restricción se extiende a toda la provincia.
